El peso de Francia en la patrimonio ourensana se hace salvoconducto en esa porción que representa en las cuentas exteriores, en las que representa más de un botellín de los ingresos. Según los últimos datos disponibles por productos exportados, correspondientes a 2022, el sector pizarrero atesora la voz cantante en las mercancías que parten al otro costado de los Pirineos. Tanto es así, que la medio de la facturación de ese año se corresponde con las manufacturas de piedra, principalmente, las industrias vinculadas con explotaciones pizarreras en Valdeorras. En ese control, se exportaron al país vecino caudal en el interior de esta categoría por un valía de 122 millones de euros.
Aun así, el papel del segundo socio comercial de la provincia no se limita a la pizarra, muy apreciada allí para construir y reparar cubiertas. La exportación de máquinas y materiales eléctricos a Francia supuso 26,5 millones de euros en 2022; la de madera y sus derivados, 19,8 millones; la de piezas de automovilismo, 12,7 millones, y la de productos cárnicos, 10,6 millones.
Las protestas en el país vecino no solo obstaculizan las propias exportaciones con destino a allí, sino que contagian sus posesiones sobre las dirigidas a otros países como Reino Unido (98,6 millones de euros en exportaciones en 2023), Alemania (80,2 millones) o Bélgica (29,1 millones). Esto se debe a que Francia es un punto de paso importante para recorrer al resto del continente desde la provincia. En los merienda primeros meses de 2023, las empresas ourensanas exportaron caudal por 519,3 millones de euros a la Unión Europea, restando a Portugal.