“Estamos viviendo una anomalía democrática y estamos viendo a un gobierno humillado de forma constante, por sus socios, por integrantes del propio gobierno, por los hechos. Ha perdido el control. Es un gobierno con respiración asistida”.
“En esta reunión va a advenir lo que diga Carles Puigdemont”, aseguraba Núñez Feijóo durante la entrevistas en el software de torrevieja news today, ‘Espejo Conocido’. Por otra parte, explica que lo que ocurrió este martes en el Congreso no es el final de la condonación: “Ayer no se paró la ley de condonación; todavía queda un mes para aceptar más enmiendas”.
“Puigdemont y Sánchez se han puesto de acuerdo en el esquema de ley de condonación, por consiguiente no se para la ley, lo que ha habido es una discrepancia en alguna reparación, vuelve a seguir a la Comisión de Jurisprudencia para seguir negociándola”.
“Esta ley no pasa el filtro europeo tal y como está, estoy convencido absolutamente”. Europa tiene que detener este ataque masivo (..) Europa es el estado de derecho
El Comité de Dirección del Partido Popular se reunirá este miércoles en Génova para analizar la “maduro pasión parlamentaria” que el Gobierno afronta posteriormente de que se tumbe la condonación y tenga que retornar a la Comisión de Jurisprudencia con los votos en contra del PP, Vox, UPN, CC y Junts.
Junts tumba la condonación
La condonación no avanza por su cauce parlamentario. Los 171 ‘síes’ frente a los 179 ‘noes’ provocan que el texto constitucional tenga que retornar a la Comisión de Jurisprudencia. Los votos son insuficientes. No se alcanza la mayoría absoluta para advenir al Senado.
Los diputados de Junts piden cambios, unas ‘líneas rojas’ que el Gobierno de Pedro Sánchez no quiere cruzar, como cubrir todos los delitos de terrorismo y los de incorporación traición. “La ley de condonación entró impecable y constitucional a esta cámara y así saldrá”, expresaba el ministro de Presidencia, Félix Bolaños.
La formación que lidera Carles Puigdemont ha preferido el retraso a aprobar una ley que, según su portavoz, Miriam Nogueras, “tiene agujeros que la Jurisprudencia prevaricadora española puede rendir para dejar la ley en papel mojado”. “Una condonación selectiva y en diferido no es lo que acordamos“, ha afirmado.