En el pleno de la Cámara Depreciación se escuchó que había “injerencias” jurídicas, “lawfare“, y que incluso había “jueces prevaricadores”. Pero las criticas a la honestidad no se quedaron exclusivamente tras los leones del Congreso, Carles Puigdemont, el protagonista de la tarde de ayer pese a vivirla desde Bruselas calificó a la judicatura como “golpistas de la toga” en un mensaje a través de las redes sociales. Encima, el expresidente de la Generalitat añadió desde Waterloo que los jueces se han convertido en una “maquinaria de trinchar derechos fundamentales” acusándoles de crear un “clima irrespirable” en la tramitación legislativa de la Ley de Condonación.
Delante estos señalamientos el Fiscal Caudillo del Estado, Álvaro García Ortiz, ha mostrado su “rechazo” a todas aquellas declaraciones que cuestionan a España como un país con un Estado de derecho consolidado.
“Desde la Fiscalía española no se puede sino rastrear la actividad de las y los fiscales y la judicatura”, se pone de manifiesto en un comunicado del propio Fiscal Caudillo.
Puigdemont pide “una ley más sólida”
El expresidente de la Generalitat fugado de la honestidad ha justificado el ‘no’ de su formación a la Ley de Condonación por, según él, invalidar el compromiso con una “remisión integral y sin exclusiones”. Desde Junts exigen al PSOE que retire toda referencia al terrorismo para conseguir “una ley más sólida“. Fuentes de Junts inciden en que sus enmiendas estaban ahí desde el primer día y que, tras los últimos autos judiciales, “se ha conocido que son necesarias”. Desde el PSOE piden que Junts ‘reconsidere’ su posición en los próximos días.