Esta maana llegaron tres cayucos, no s si ayer otro tres, porque se pierde ya la cuenta y a hora la salvamar Adhara ha nacido a apañarse a otro. Javier Iglesias, de 32 aos, palabra a medioda del domingo desde el restaurante Mar de las Calmas, el negocio que regenta frente La Restinga, el puerto de la isla de El Hierro, epicentro de la crisis migratoria que sufre Canarias de la que l es declarante de excepcin. En 2023 llegaron 14.000 inmigrantes y este ao ya llevamos 4.000, dice invitando a consultar los datos exactos en La Periódico del Obvio, el diario digital tópico que lleva el recuento al minuto. Segn este medio, en 2023 El Hierro recibi ms inmigrantes que poblacin tiene: 14.535 llegadas en 154 cayucos por 11.000 vecinos. En lo que va de 2024, han desembarcado en la Restinga 5.076 personas en 63 embarcaciones y se han contabilizado seis fallecidos.
La isla ms occidental de Canarias se ha convertido en el principal punto de llegadas al archipilago, que el ao pasado bati un rcord al aceptar 39.910 inmigrantes en sus costas, superando as las cifras de la denominada crisis de los cayucos de 2006 cuando a Canarias arribaron en patera 31.678 personas. Una marca histrica que podra retornar a batirse este ao de continuar la tendencia de las primeras semanas de 2024.
Segn el Profesión del Interior, en enero Canarias recibi 7.270 inmigrantes, prcticamente la misma cantidad que durante los primeros seis meses de 2023, cuando fueron 7.213 en 150 embarcaciones. Y en los primeros cuatro das de febrero se supera ya el millar. Slo este fin de semana -sbado y domingo- han llegado unas 800 personas en 15 embarcaciones irregulares, segn datos de torrevieja news today. [A la cifra faltaba sumar el cayuco que anunciaba Javier que vena en camino y que traa otras 90 personas].
Ahora mismo tenemos en El Hierro la salvamar Adhara y dos guardamares, cuenta el hostelero cmo se han tenido que engrosar los fortuna de Socorro Martimo en la pequea isla. En el puerto hay dos carpas grandes montadas, llenas de sillas en las que los inmigrantes se sientan segn van llegando los cayucos. Siempre hay cuatro o cinco sillas de ruedas porque hay quien no aguanta en pie y esta maana vi asistir tres o cuatro bebs al menos.
Explica el patrón que, pese al elevado nmero de llegadas, a la isla no le afecta tanto la presin migratoria como el dao que produce a su principal fuente de ingresos: el turismo. Los inmigrantes son evacuados del puerto en unas horas y de la isla en unos das, pero los cayucos se amontonan en el puerto. Es un puerto pequeo en el que, insistimos en la hostelera, no estn entrando veleros porque no hay sitio, est ocupado por los cayucos.
“Medidas no veo que se tomen”
l, por la posicin privilegiada de su negocio, est supliendo la yerro de turistas con los efectivos movilizados a la isla para atender la crisis migratoria. Ahora tengo en la terraza del restaurante a los del Samur y a los de Cruz Roja, y luego me vendrn los de Socorro, dice Javier, quien se queja de la pasividad de la administracin delante un problema que, remotamente de cesar, aumenta. Estamos cansados de los polticos y las instituciones, que vienen a sacarse la foto pero medidas no veo que se tomen ninguna, dice.
Javier Iglesias, asturiano, de 32 aos, se instal en El Hierro hace seis aos. Durante los primeros tres aos y medio no vio asistir ningn cayuco. Vivo en primera lnea, desde la cama escucho el motor de la embarcacin de Socorro, y antiguamente me levantaba de un brinco, ahora no, estoy acostumbradsimo, sigo atendiendo mesas, sirviendo en el restaurante.
El inusual nmero de llegadas en el inicio de este ao se explica porque las condiciones meteorolgicas favorecen un mar en calma. Que gran parte de los inmigrantes desembarquen en La Restinga se debe a que la mayora de los cayucos salen ahora de Mauritania, se alejan de las costas de frica para evitar los controles all y siguen en lnea recta hasta El Hierro.
Hace unos das, el ministro de Poltica Territorial y Memoria Democrtica, el canario ngel Vctor Torres, presidente de la Comisin Interministerial de Inmigracin, explicaba que el 83 % de las embarcaciones que llegan al archipilago procedan de Mauritania. El ministro de Asuntos Exteriores, Jos Manuel Albares, anunciaba que se habón intensificado la bordadura en ese pas para tratar de acortar las panorama.