El dato de ocupación de agosto superó en 11 puntos las previsiones realizadas a finales del pasado mes de julio. Los hoteles de cuatro y tres estrellas registraron el 92,5% de las plazas ocupadas, un 10% más que el año pasado; viviendas de turismo rural, el 91,3% (+7%), y viviendas turísticas y de uso turístico, el 88,7% (+1%). Sólo el resto de alojamientos bajó en ocupación, que supuso el 86,6%, un 10% menos que en 2022.
Para septiembre manejan “las previsiones más altas desde que tenemos registros”. El sector se muestra “muy optimista”. Tanto es así, que el Consorcio predice ocupaciones del 78% en hoteles de cuatro y tres estrellas; el 63% en casas de turismo rural; el 45% en vivienda turística y uso turístico y, finalmente, el 75% en el resto de alojamientos.
También el El balance de ocupación media también es positivo. El balance de los meses centrales del verano -julio y agosto- arroja un 82% de plazas ocupadas, nueve puntos más que en 2020 y seis más que en 2022. A la cabeza, los hoteles de cuatro y tres estrellas, que “siguen ser o tipo de alojamiento preferido”.
En esta campaña se incorporaron a la Ribeira Sacra cinco municipios: Chandrexa de Queixa, Manzaneda, Pereiro de Aguiar y San Xoán de Río. Sumaron 61 establecimientos con 1.305 plazas. “Pasamos de tener 103 establecimientos en 2010 a 709”, detallan desde el Consorcio.