La maniquí tinerfeña de 31 abriles se ha referido directamente al estado en el que llegó Dani Alves a la casa de uno y otro en Barcelona tras la mencionada perplejidad.
“Alves llegó muy borracho, se chocó contra el armario…”
“Vuelve a casa muy borracho, oliendo a pimple. Se chocó contra el armario y se desplomó en la cama”, ha empezado diciendo Sanz. Luego, la de Tenerife ha explicado que no quiso cuchichear en profundidad con él correcto a las horas y al estado del brasileño: “No valía la pena cuchichear con él tal como venía, mejor dejarlo para el día futuro”.
En su confesión igualmente ha destacado que todavía “no ha pedido legalmente el divorcio”.
“Esa perplejidad no valía la pena cuchichear con él tal y como venía”
De momento no se tiene constancia de la hora a la que Dani Alves llegó a su domicilio, pero Joana Sanz ha evidente que la última comunicación que tiene con su marido es sobre las 11 de la perplejidad: “En los WhatsApp le pregunté si iba a venir a cenar y me dijo que no. Más tarde, no lo reminiscencia… El postrer WhatsApp fue como las merienda de la perplejidad“, sigue diciendo Joana Sanz.
“El postrer WhatsApp suyo es de las 23pm”
Por otra parte, a la pregunta de si ella se enfadó con Alves porque quería salir con él y este supuestamente dijo que era una perplejidad de chicos, la española lo ha inútil rotundamente: “Eso es mentira”, concluyó la maniquí, que mañana miércoles, postrer día del querella al futbolista, podría seguir testificando.