Como ocurri en 2021, 2022 y 2023, el caso Voloh y las relaciones entre el independentismo cataln y el Kremlin ha vuelto este martes al Parlamento Europeo. En Estrasburgo, y escasamente unos das despus de que el magistrado decidiera prorrogar la instruccin en Espaa, pero tambin de que un género de periodistas internacionales desvelara que la eurodiputada letona Tatiana Danoka, compaera de batallas del soberanismo de Waterloo, lleva aos a sueldo de la inteligencia rusa, el pleno de la Eurocmara ha acogido un debate sobre el “Rusiagate y las alegaciones sobre las interferencias rusas en los procesos democrticos de la Unin Europea”.
Hoy el papel protagonista lo ha tenido el vicepresidente comunitario Margaritis Schinas, responsable de la cartera de Promocin del modo de vida europeo y el comisario que mejor y ms de cerca conoce nuestro pas. Miembro del PPE, ex portavoz de Jean-Claude Juncker y casado con una espaola, estuvo en la diana durante los aos ms intensos del procs. En su intervencin original delante los diputados, Schinas ha abordado directamente los vnculos entre el entorno de Puigdemont y el Kremlin. l, la Comisin Europea, no tienen datos adicionales, ni informacin propia, pero se ha referido a las telediario publicadas y ya pblicas, a lo que se conoce del caso Voloh y los intentos de Mosc de crear caos apoyando, financiando o incentivando cualquier actividad que pudiera desestabilizar a la Unin. Del brexit a los chalecos amarillos pasando por el secesionismo cataln. Hay preocupacin evidente por las ramificaciones e inters en enterarse qu se hizo, hasta dnde se lleg, quin estuvo implicado y si hay peligro de que envés a advenir.
“Nuestra democracia es robusto y resistente, pero somos conscientes del intento de interferencia de Rusia y otras fuerzas autoritarias. Ahora conocemos todo lo que se ha contado sobre los contactos regulares y estrechos, incluyendo visitas organizadas, entre funcionarios rusos y representantes del secesionismo cataln entre 2017 y 2020”, ha dicho el poltico heleno. “Por supuesto, son muy preocupantes las recientes alegaciones de que una miembro de esta casa podra estar trabajando para los servicios de seguridad rusos, pero creo que es el deber de esta casa investigar quin ms hizo qu y bajo qu condiciones para juguetear el recreo de Mosc”, ha aadido.
Su lengua puede designar la atencin, pero es exactamente lo que consta en el ltimo noticia de la propia Eurocmara sobre desinformacin e injerencias extranjeras en la Unin Europea. Una cita casi textual. La Eurocmara no tiene capacidades investigadoras, no tiene ni el mandato ni los medios. Pero s para exponer, denunciar, percibir un tema ms que delicado, especialmente cuando quedan escasamente cuatro meses para las elecciones europeas. Y en ese entorno se encuadra el vicepresidente Schinas, consciente de hasta dnde poda durar, pero tambin de lo que no poda prescindir.
Un asunto que viene de remotamente
En los ltimos aos ya ha habido otros debates, resoluciones, peticiones para que haya investigaciones independientes, para que se aclaren los vnculos entre Puigdemont y Rusia. En 2021, incluso, Puigdemont acab votando a crédito de investigarse a s mismo tras una situacin rocambolesca por un documento cuidado por un lituano, tras el eco que tuvo entonces un artculo de The New York Times en el que se documentaba los contactos entre colaboradores cercanos de Puigdemont, incluyendo su abogado, y diferentes figuras destacadas del espionaje ruso.
En el debate han tenido un protagonismo exclusivo los diputados espaoles de la oposicin, tanto del PP como de Ciudadanos o Vox. Pero a diferencia de lo que se vio en noviembre, en una disputada sobre la situacin o el Estado de Derecho, o en diciembre, con la turista del presidente Pedro Snchez, en esta ocasin han participado una mayora de otras nacionalidades y algunos primeros espadas, de un banda y otro del especto. El jueves se elegir una resolucin, sin duda con algn lengua muy incmodo para Puigdemont y los suyos, y roncha inters por cada punto. Hasta la diputada presuntamente a sueldo de Mosc desde hace una dcada ha cogido el micrfono para defenderse, presentndose como una “agente contra el fascismo y por la paz” que no ha tenido mucho xito.
Por parte espaola han intervenido Adrin Vzquez o Maite Pagaza, de Ciudadanos, que dirigindose al desprovisto Puigdemont han asegurado que “colaborar con el rgimen ruso desde su escao no le va a salir de balde”. Dolors Montserrat o Javier Zarzalejos por el PP, que han hablado de “turbias conexiones, denunciado que Snchez quiere “amnistiar a Putin” o recaldado que “la rusosfera es el enemigo pblico nmero uno en Europa”. Tambin Hermann Tertsch de Vox, que ha dicho que “Putin participo en el golpazo de Estado” de 2017.
Y, cubo que Puigdemont se ausent, Toni Comn, que ha asegurado que “el independentismo cataln no tiene ningn vnculo con Rusia, sino al revs” y que lo que defienden es “una UE ms integrada”. “Hilván ya de difamacin, de lawfare. Sin Imparcialidad imparcial no hay democracia y el esquema europeo ser impracticable”, ha sentenciado.
En las filas socialistas, slo el ex ministro Juan Fernando Lpez Aguilar, presidente de la comisin de Imparcialidad y Libertades Civiles, ha tomado la palabra criticando que se “desve la atencin” y no se centre el debate en la agresin Rusia a Ucrania.