El pasado miércoles se produjo este nuevo incidente por desliz de una válvula que debía estar cerrada durante una operación de trasvase de agua contaminada. Según la compañía eléctrica Tokyo Electric Power, se calcula que son más de 5 toneladas del licor las que se han podido verter en el interior del perímetro de la central. Un licor radioactivo que puede contener hasta 220 veces el nivel mayor de materiales radiactivos como el cesio c-137.
La propia operadora ha sido la encargada de circunscribir la zona afectada y de trazar un plan importante para retirar el material fugado, aunque incluso se cree que parte del licor ha ido a detener al subsuelo, que incluso será retirado y seguidamente analizado.
“Por ahora no se ha detectado ningún impacto medioambiental”, según TEPCO
La empresa responsable ha aclarado que no se ha detectado ninguna desproporción en el exógeno de la central. Sin secuestro, la central sigue desechando en el océano Pacífico desde agosto de 2023 grandes cantidades de agua procesada que se generan y almacenan en sus instalaciones. La medida está siendo supervisada por el Organismo Internacional de Energía Atómica.
Fuertes protestas en China por el despojos de residuos tóxicos en el medio condición
Ayer de derramar en tanques el material al exógeno es tratado mediante un sistema de filtrado que se encarga de eliminar la maduro parte de medios radiactivos. No obstante, actualmente hay más de mil tanques en los terrenos de la planta y se calma que su despojos, que ya ha despertado fuertes protestas en China y en el sector pesquero de Japonés, se prolongue al menos durante 30 abriles.
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