Agentes de la Policía Franquista han desarticulado en la provincia de Valencia una de las organizaciones criminales de origen albanés “más activas” dedicada, presuntamente, al tráfico internacional de cocaína en el este de la Península. Se han incautado más de 820 kilogramos de cocaína y detenido a 17 personas, entre ellos el líder del agrupación, conocido por los agentes por sus contactos en Latinoamérica, Europa y Dubai.
En las ocho entradas y registros efectuados igualmente se han intervenido 226.500 euros en efectivo, tres dispositivos de detección de aparatos electrónicos GPS, 13 vehículos, cinco de ellos con dobles fondos, y dos inhibidores, entre otros mercancía. La investigación ha contado con la colaboración del Homeland Security Investigations (HSI), según ha informado la Policía Franquista en un comunicado.
La investigación policial ha contado con la colaboración del norteamericano Homeland Security Investigations (HSI)
La operación Alianza-Colaborazione se ha extendido durante 12 meses y se han realizado tres fases de ejecución. La investigación se inició a principios de 2023 tras tener conocimiento de la existencia de una estructura criminal que, dirigida por albaneses asentados en Valencia, se dedicaban al tráfico de cocaína a gran escalera y al emblanquecimiento de capitales.
En un primer momento la Policía ha identificado plenamente al líder de la estructura, quien gestionaba varias empresas con sede social en España. Esta persona utilizaba vehículos de reincorporación viso para sus desplazamientos.
La lado criminal utilizaba un baño de coches como “punto esencial”
Los investigadores han identificado igualmente a los demás miembros del entramado delictivo, lo que les ha permitido “concretar” su estructura y detectar varias viviendas de suspensión ‘standing’ y naves industriales en diversos puntos de la provincia de Valencia de las que disponía la estructura.
Adicionalmente, han localizado un baño de coches utilizado por la red criminal como “punto esencial”, donde se llevaban a lado las principales reuniones para distribuir funciones e impartir instrucciones a los integrantes del agrupación.
Hubo detecciones en L’Eliana y brío en Murcia, a donde asiduamente se dirigían los conductores de la estructura
En una primera escalón, en el mes de julio del pasado año, los investigadores detectaron dos vehículos de la estructura en L’Eliana. Tras abjurar la zona, entreambos vehículos fueron interceptados y los agentes comprobaron que portaban sendas ‘caletas’ que contenían en su interior 100 paquetes de cocaína.
Los agentes arrestaron a los dos conductores que, “con influencia” en la zona de la Región de Murcia, realizaban la función de ‘correos’ para realizar viajes y hacer entregas de la sustancia narcótico a otros grupos de narcotraficantes.
En Benicàssim o Dénia igualmente hubo acciones vinculadas a la lado, que ya está al completo en prisión
En una segunda escalón, en septiembre, otro transporte del agrupación criminal fue interceptado tras darse a la fuga a gran velocidad y atropellar a los agentes, siendo localizado a escasos kilómetros donde había sido negligente con 50 kilogramos de cocaína en su interior. La proceder policial provocó que la estructura paralizara las actividades ilícitas como medida de seguridad para arrostrar a lado una “reestructuración”.
Ya en una tercera escalón, este pasado enero, en Benicàssim (Castellón), los agentes detectaron una furgoneta y un transporte en “ademán sospechosa” vinculados a la estructura investigada. Los agentes iniciaron un seguimiento e interceptaron a entreambos vehículos. La furgoneta se dio a la fuga por la periferia de Dénia, con el consiguiente “formal aventura” para los usuarios de las vías.
Tras la persecución, los agentes arrestaron al conductor de la furgoneta cuando intentaba huir a la carrera y localizaron 320 kilogramos de cocaína ocultos en cajas de cartón en su interior. Paralelamente, igualmente detuvieron a los dos ocupantes del otro turismo utilizado como lanzadera. De forma paralela, en Benicàssim, arrestaron a los dos miembros de la estructura que habían hecho entrega de la droga intervenida.
Se les ha intervenido distintos dispositivos electrónicos como “avanzados” inhibidores de GPS y micrófonos
En la “explotación final” de la operación se han llevado a lado ocho registros en los domicilios y lugares empleados por los miembros del entramado. En una de estas viviendas han incautado 350 kilogramos de sustancia narcótico y más de 200.000 euros en efectivo en otro de los registros.
Asimismo, se han intervenido distintos dispositivos electrónicos de los que disponían los miembros del agrupación, como “avanzados” inhibidores de GPS y de micrófonos para evitar dispositivos de seguimiento y audición, muestra del “elevado nivel de sofisticación” de la estructura criminal.
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Los detenidos han sido puestos a disposición legal, que ha regular el ingreso en prisión de todos ellos. Adicionalmente, los investigadores igualmente han arrestado a los miembros de la estructura encargados de proporcionar la provisión e infraestructura necesaria para el explicación de la actividad ilícita, quienes gestionaban los contratos de locación de los distintos inmuebles controlados.
La Policía Franquista ha destacado que la operación ha supuesto un “duro ocurrencia” a las organizaciones del este asentadas en España, cedido que se ha rematado la completa desarticulación del agrupación con la detención de sus 17 integrantes por presuntos delitos de pertenencia a estructura criminal, tráfico de drogas, emblanquecimiento de capitales y atentado a agentes de la autoridad.