El “voto de confianza” en el Cardenal Quiroga para alcanzar la “mayoría absoluta” del avance a la Preferente fue para el Verín de Miguel Sotelo, que se llevó el triunfo del complicado campo del Maceda con un inobjetable 0-2 con un tanto en propia meta de Arrón en el minuto 37 y la sentencia de Hugo Domínguez en el 60.
El técnico recinto Iván Gómez sabía que los suyos no podían despistarse frente a un rival que maneja varios registros y de alguna forma le cedió la posesión del balón, esperando que en alguna situación armara una contra. Pero el Verín no se descuidó y desde los primeros minutos sus jugadores le hicieron apreciar el rigor a Iván Rubio, el buque insignia de los macedanos, que llegaba al partido entre algodones y no pudo continuar en el inicio del segundo tiempo.
La disciplina de los anfitriones mantenía, de alguna forma, el resultado, que no era para despreciar tomando en cuenta la entidad de su oponente. El único disparo a puerta fue de José, pero el balón, controlado con la observación por el meta Borja, se marchó cerca del palo derecho.
Pasaban los minutos y el 0-0 parecía inamovible hasta que una corte defensiva la aprovechó Mou, ganando las espaldas y filtrándose por la manada izquierda para plantarse frente a la desesperada y poco tardía salida de Iván. Su remate, que parecía impedirlo Aarón, fue introducido por el ayer defensa.
El Paraíso se le abrió al Verín frente a un Maceda que acusó el leñazo y sufrió en los instantes finales antaño de bajarse el telón del primer acto. Enio pudo colocar el 0-2, con un potente tiro que providencialmente se desvió en dos defensores. Un par de minutos a posteriori, Hugo Domínguez colgó con ingenio un balón al corazón del radio, pero el posterior cabezazo de Yaguito se perdió cerca del palo derecho.
Los macedanos sentían que aún quedaba partido por delante, pero para eso debía arriesgar más para pretender ascender al igualada. Sin bloqueo, los verinenses no querían darle vida a su candidato oponente, que llevaba una buena destello sin derrotas en su feudo, pero que se quedaría con diez jugadores al irse de boca Siota y ser notificado por el asistente al árbitro principal, que con la roja le indicó el camino de los vestuarios. Con este panorama, el Verín gozó de más espacios y Enio pudo ampliar la superioridad con un gran disparo que alcanzó a desviar con la brote de los dedos el cancerbero recinto, mandando el balón al córner.
La estocada visitante se generó por la manada derecha por medio de Fondevila, que metió un consumado pase detrás para que Hugo Domínguez, librado de marcas, sacara un impecable remate que se coló por la escuadra frente a la observación desoladora de Iván para poner el 0-2. Con esta superioridad, al Maceda se le hizo una cometido ficticio poder ascender con peligrosidad a los dominios de Borja y a lo único que atinó es a que no le cayeran más goles del líder.
Más oportunidades
El Verín pudo aumentar la diferencia con un tiro de Mou que desvió con apuros el zaguero macedano y, seguidamente, Clayton desaprovechaba un centro de Fondevila con un cabezazo fallido. A pesar de tener todo el pescado vendido y que en la consulta popular era mayoritaria en gracia del Verín, su secretario común del banquillo no aceptaba que el candidato se relajase. Tanto es así que Iván impidió el 0-3 desviando sobre el viga un disparo de Clayton.