«Es la ciudad del ocio»
Huyen impetuosos los madrileños en época veraniego. Se escabullen de la ciudad. De sus luces, de su asfalto, de su algarabía. Reniegan de la barahúnda de sus madrugadas, normalmente imprevistas. Y de sus garbeos tardíos. Se convierten en desertores de su propia metrópoli. Pero Madrid nunca yacerá sola. Ahora, en agosto, otros la abordan. Durante […]