Acerca de 150 invitados presenciado tal momento. Cristina fue llamada infiel frente a sus amigos y familiares por el que iba a ser su esposo, quien reveló a todos una lista de sus supuestas amantes. Aunque sobre todo se destacó uno: “Quiero darte la libertad de amar En particular, otra persona, un abogado muy conocido”.
Así sucedieron los hechos
Después de una velada aparentemente pacífica de música y baile, Massimo subió al escenario con el DJ y le pidió a su prometida que lo acompañara. Tras las palabras de Cristina, habló con su futuro marido. Fue entonces cuando comenzó la tragedia. En primer lugar, sus palabras parecieron conciliadorasya que hablaba de amor, pero las cosas no tardaron en calentarse: “Te daré el regalo más grande. El regalo que te doy es la libertad. no me casaré contigo“.
Massimo luego agregó: “Siempre he pensado que amar a una persona es desear su bien, incluso más que el propio. En este caso, quiero darle a Cristina la libertad de amar. En particular, a otra persona: un conocido abogado”. ” . Massimo también anunció el fin inmediato de la convivencia e instó a Cristina a que se fuera con “su abogado” de ella, en referencia a su supuesta amante.
Pero esa amante principal no es la única que Massimo ha querido traer a colación. El empresario también destacó otras traiciones y mentiras. Se dio la vuelta y se quedó petrificada: “No crean que disfruto desvelando un cornudo frente a todos ustedes”.
¿Quiénes son?
Parecían la pareja perfecta. dos almas idílicas. Ambos fueron construidos para los negocios. Massimo Segre, 64 años, es empresario y banquero en Turín. Es jefe de estudio de Crocetta y director de Directa Sim. También es miembro de la junta directiva de la editorial que publica el periódico Domani y presidente de la Fundación de Investigación Molinette Onlus.
Un hombre de negocios que compartió su vida durante unos años con el gran Cristina Seymandi, 47 años. Cristina es hija de un conocido empresario de Turín, que siempre ha tenido pasión por la política y pasión por los negocios.
Después cinco años en políticase midió con la profesión de empresaria siendo directora general de Savio, una empresa especializada en accesorios para puertas y ventanas con 153 empleados vinculados a su exnovio Massimo Segre, el mismo que la había designado como presidenta de la Fundación de Investigación Molinette Secretario general de la institución