Sobre las 07.39 de la alboreo, la Policía acudió al ocupación indicado por el vecino donde comprobaron que se trataba de un irreflexivo de muy corta momento, a quien el vecino había protegido de la afluencia y las bajas temperaturas en el interior de su transporte.
El irreflexivo estaba desorientado y no paraba de fluir y de tocar a su hermana, y fue abrigado y tranquilizado por uno de los policías, quien consiguió que mediante señas le indicará una dirección.
La hermana había dejado al pequeño al cuidado de otra persona
Los agentes consiguieron hallar a la hermana, quien, al parecer, según su refrendo, regresaba de resistir al padre del bebé a su ocupación de trabajo. Además relató que, durante su abandono, había dejado al pequeño al cuidado de otra persona que, supuestamente, se había quedado dormida, ignorando como el pequeño podía activo hendido la puerta.
Una vez en el interior de la vivienda, los agente observaron indicios de que se habían estado consumiendo estupefacientes y todo el interior estaba muy embrollado y desaliñado. Por otra parte, las explicaciones que daban los adultos presentes eran contradictorias.
La situación requirió la presencia del personal de Servicios sociales del Junta de Petrer, quienes, tras una primera entrevista con los responsables y en defensa del interés del pequeño, acordaron que el bebé quedara bajo la tutela de la abuela materna mientras se lleva a agarradera la correspondiente investigación, con el asesoramiento de la Consellería, para determinar las posibles responsabilidades y pactar la tutela definitiva del pequeño.
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