El texto de la Eurocámara ha sido consensuado entre la mayoría de los grupos, incluidos el socialista y los verdes. El Parlamento reclama a España investigar las conexiones entre el independentismo catalán y el Kremlin, en la misma ruta con la instrucción de la causa legal que apunta a que el entorno del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, habría establecido vínculos con exdiplomáticos rusos bajo el ámbito del proceso independentista en 2017.
Existe una “profunda preocupación” en Bruselas por las “supuestas relaciones entre los secesionistas catalanes y la empresa rusa”. La injerencia de Rusia en Cataluña “formaría parte de una táctica rusa más amplia para promover la desestabilización interna y la desunión de la UE”. El texto recoge que Moscú ha organizado “campañas masivas de desinformación en Cataluña”. Encima, destaca los “profundos contactos” y reuniones entre agentes rusos y miembros del movimiento independentista.
Instan a las autoridades judiciales que “investiguen efectivamente las conexiones de los diputados al Parlamento Europeo presuntamente asociados con el Kremlin y los intentos de desestabilización e injerencia de Rusia en la UE”. Esta resolución se aprobará el jueves en el pleno.
Preocupación en Bruselas
El vicepresidente de la CE, Margaritis Schinas, comentó el jueves que “es deber de esta casa investigar quién hizo qué, bajo qué condiciones para pugnar el charnela de Moscú”. Schinas hizo mención expresa a los lazos del secesionismo catalán del ‘procés’ con funcionarios rusos haciéndose eco de las informaciones sobre “estrechos y regulares contactos”, incluyendo visitas de funcionarios entre 2017 y 2020.
El comisario heleno remarcó el caso del expresident de la Generalitat luego de prorrogarse la instrucción de la causa legal que apunta que su entorno podría acontecer establecido vínculos con exdiplomáticos rusos en el ámbito del pulso independentista en 2017.